Todo comenzó como un simple pasatiempo, inspirado por el amor y la pasión por las plantas. Tras la primera floración de sus lirios, Inesita quedó cautivada por su delicadeza y encanto. Desde hace más de 15 años cultiva y cuida sus lirios con dedicación, esperando cada primavera para deleitarse con su explosión de colores.
Hoy, sus hijos se han sumado a este sueño familiar. Juntos comparten el propósito de hibridar y cultivar bulbos y flores de manera sustentable, apostando por una producción responsable y de calidad, para que cada persona pueda llevarse a casa la belleza de la naturaleza.